Escarlopes al Marsala
INGREDIENTES Escarlopes al Marsala
- 500 gr de bifes finos de cuadril, nalga, etc.
- 1 taza de harina
- ½ taza de aceite de oliva
- 30 gr de manteca
- 1 cebolla
- 1 ramita de romero
- 1 taza de vino Marsala o Oporto
- 1 taza de agua hirviendo
- 1 cubo o sobrecito de caldo de carne
- 2 cucharadas de aceto balsámico (opcional)
- Sal y pimienta
PREPARACIÓN Escarlopes al Marsala
Aplanar los bifes sobre una tabla y salpimentar a gusto.
Rebozar en harina, sacudiendo lo que sobre. Reservar en una fuente hasta terminar con todos los bifes.
Calentar 1/2 taza de aceite de oliva con 30 gr de manteca en una cacerola o sartén grandecita.
Sin dejar que la materia grasa humee o se oscurezca, colocar los bifes de a pocos por vez.
Dorar de a uno minutos de cada lado.
Retirar y reservar en un plato hasta terminar de freír todos los bifes.
Una vez terminado este procedimiento, desechar la grasa y limpiar el fondo de la cacerola con papel de cocina. Esto sirve para que la comida resulte más digerible, suave y liviana. Sí, el aceite sobrante, después de freír todos los bifes, queda oscuro como aceite de auto, porque la harina del rebozado se va ennegreciendo. Por eso lo tiramos.
Mientras se fríen los bifes, picaremos finamente una cebolla.
Colocar la cebolla en la cacerola con 1 cucharada de aceite limpio, sal y una ramita de romero y rehogar a temperatura suave.
Medir 1 taza grande (250 ml) de vino Marsala.
Verter el Marsala en la cacerola sobre la cebolla rehogada.
Agregar también 1 taza de agua hirviendo.
Colocar un cubito o sobrecito de caldo de carne y dejar disolver.
Dar el “toque especial” con 2 cucharadas de aceto balsámico (opcional).
Una vez que todo hierva, distribuir los bifes en la olla, procurando que todos queden embebidos en la salsa. Bajar la temperatura a suave, cubrir y dejar cocinar por 10 a 15 minutos.
Una vez transcurrido ese tiempo, la salsa se habrá espesado sola, por la acción de la harina con la que rebozamos los bifes al comienzo de la receta. Retirar los bifes para servirlos en platos individuales o en una fuente y servir con la guarnición que más les guste.